Un contrato es como un lienzo en blanco, puedes dibujar lo que quieras pero es importante que tengas claras, ciertas pautas.
Vamos con ellas,
8 claves que te evitarán problemas en los contratos
Clave número 1 _ Ten muy claro con quién firmas
¿Parece obvio, verdad?
Pues no lo es.
Firmamos con gente a quien no conocemos, excepto por correos electrónicos o video llamadas y no tenemos certeza de que sea quien dice ser, o represente, convenientemente, a quién dice representar
He visto contratos firmados por alguien en nombre de la empresa tal, sin dejar claro cuál era su condición (Administrador, Apoderado, otro), así que primera premisa fundamental: saber con quién estás negociando y, confirmar, que puede hacerlo.
Clave número 2 _ Deja claro qué incluye el contrato, y qué no.
Si eres quién presta el servicio, déjalo claro, en el contrato o te verás trabajando gratis por exigencias [del guión] del cliente.
Te sorprenderían las suposiciones que puede llegar a hacer un cliente en cuanto a lo que incluye lo que vas a hacer por él.
Ojo, esto también aplica en sentido contrario
¿Eres tú quién contrata los servicios de otro?, pues revisa bien qué es lo que pone, en realidad, ese contrato y recuerda esta frase: las palabras, se las lleva el viento
Todo lo que hables por teléfono, en esa comida, con esa copa, en esa video llamada, en esa reunión, o dónde quiera que tengas las conversaciones relativas al servicio, que quede por escrito.
Clave número 3 _ Que tu contrato deje claro cuando cobrarás las facturas
Si es por adelantado, mejor. No eres un banco, para financiar a tus clientes.
Si no es posible esta opción, deja claro cuándo cobrarás los trabajos y, por supuesto, olvídate de referencias tipo: al finalizar los trabajos, porque es posible que, para ti, no finalicen nunca.
Clave número 4 _ Si hay problemas, deja claro dónde litigamos
Si prestas servicios para empresas, puedes dejar claro en tu contrato el lugar donde, en caso de tener que ir al pleito, se ventilará el tema.
La globalización está genial pero si vives en Sevilla y tu cliente es de Gerona, y tienes que reclamarle judicialmente, va a ser una faena tener que hacerlo a tanta distancia de tu casa.
Clave número 5 _ Pon límite de usos al trabajo que entregas
Dedicado a los creativos, sobre todo los fotógrafos.
¿Vendes tus fotos?, pues que quede claro el uso que van a darles y si pueden alterar el resultado o puedes encontrarte con tus imágenes, en cualquier sitio, y con cualquier apaño, por los restos de los restos. Amén
Clave número 6 _ Cuidado con las exclusividades
Hay clientes que quieren que trabajes con ellos, y solo con ellos, pero eso tiene un coste de pérdida de oportunidad que debes valorar convenientemente.
Puede estar muy bien asegurarte cierta continuidad, con un mismo cliente, pero si deja de llamarte, y tienes firmada una exclusividad, puedes verte en problemas.
Clave número 7 _ Recuerda que «lo que está escrito, se lee»
Si surgen modificaciones de encargos, extras, bonus por prisas y similares, que quede constancia por escrito.
En ocasiones respondemos a lo urgente, en lugar de a lo importante, y es importante que las relaciones contractuales estén claras, cuanto más mejor, y todo lo sobrevenido, también.
Si los cambios vienen por una reunión personal, una llamada, un audio de whats app, toma el tiempo de preparar un correo electrónico que refleje las modificaciones y los nuevos acuerdos de tiempo, dinero, etc, para dejar un rastro por si acaso.
Clave número 8 _ Deja claro qué pasa si el contrato se cancela antes de tiempo
Pueden suceder muchas cosas, quizá la persona que promueve tu contratación se marcha, le pasa algo, quizá hay cambios organizativos, problema de presupuesto, cuestiones sobrevenidas, ¡quién sabe!, y de repente te encuentras con un proyecto cancelado, al que tenías pensado dedicar tiempo, y por eso has bloqueado entrada de nuevos proyectos, para el que, quizá, has hecho una inversión preparándote para ello …
Pacta resarcimientos en caso de cancelación anticipada o te encontrarás compuesto y sin novio, ¡y con gastos, posiblemente!
Recuerda:
“Un contrato bien hecho no solo protege tu negocio, también tu paz mental”
Si necesitas ayuda, escríbeme.
